La verdad sigo conmocionada por la muerte de Michael... es algo que nunca imaginè que pudiera pasar, tal vez por que el vivia en nuestra mente como un personaje ochentero de ficcion maravilloso, como Garfield, que en algun momento cambio de escritores del show y perdio el encanto pero dejo un legado indeleble en nosotros la generacion de niños criados por la tele, y que de alguna manera seguimos recordando con cierta nostalgia asociada con aquella inocencia infantil, que sucedio durante la caida del muro de Berlin y el triunfo del capitalismo, con Michael haciendo el moonwalk triunfalmente en la cima del espectaculo norteamericano, se coronò como el rey del pop, y muchos de nosotros nos unimos a su corte de niños bailarines.
Me resulta muy curioso que ahora durante la fuerte crisis que sufre la economia y el sueño americano, muera su rey y nosotros vemos con tristeza como nuestra infancia tambièn se va diluyendo enmedio de las nuevas obligaciones de la vida adulta, algunos amigos se casan y otros trabajamos duro sobre nuestros proyectos de vida, para darnos cuenta de que es dificil seguir creyendo en la magia que Michael siempre cantò y bailò, y que por un derrumbe anunciado es hora de salir desterrados de Neverland, a donde no podremos regresar.
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2 comentarios:
Que curioso que durante sus ultimos años de vida a Michael lo veíamos como el hombre excéntrico de glorias pasadas y cara de zombie que se ocultaba del mundo, y ahora que ha muerto, lo que recordamos de él no son sus escandalos sino su trabajo.
Eso sí es dejar un legado.
existen milagros..
que suceden para todos..
debes mantenerte fuerte y seguir buscando.-un abrazo cordial liz
atte lala
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